Luz de luna -Jane Vulturi-

Los días después de mi visita a España habían pasado con tanta rápidez como si de envejecer se tratará, todo esto por la burla del tiempo cuando eres inmortal, hay días que duran años y años que duran segundos. ¿Cuando fue la última vez que descanse en un lugar seguro? Esa es una de esas preguntas que abundan en la mente de un nómada, tal vez en el deseo de una jovencita de mi edad siendo humana, este el deseo de viajar sola por el mundo, conociendo lugares sin la protección de tus padres...Pero cuando has cumplido tantos años de soledad, hasta conocer lugares nuevos te resulta un tanto automatico, casi vanal.

De esa manera llegué hasta Italia, no sabía por que pero desde hacía unos meses, todo me enviaba hacia los Vulturis, a las primeras personas que conocí habían sido Renata y Sandra ambas en contacto demasiado cercano a los Vulturis, y luego él...Andrés que estaba también vinculado a ellos.

De esa manera había tomado la determinación de viajar a Volterra, para verlos, para conocerlos para saber que era lo que estaba en medio de los Vulturis, que de manera precedente se me presentaban frente a mí, no era de extrañar que ahora mismo, estuviese siendo vigilada por alguno de ellos, de manera inquietante me voltee hacia atrás. No era de extrañarse puesto que estaba en sus tierras. Pero eso me incomodaba, no estaba acostumbrada a que me vigilasen y el hecho de que las miradas recayeran sobre mí era exraño demasiado extraño.